"Hay que convertirlo todo en amor" con esta motivadora frase celebramos junto con Santa Luisa nuestra querida Madre el SI de Sor Myrian Vega Sosa en la ratificación de su entrega en la Compañía de las Hijas de la Caridad, celebración vivida en un ambiente muy alegre y fraterno en la ciudad de Nueva Italia en la Comunidad de la Casa San José. La Eucaristía en una liturgia sencilla pero muy emotiva fue presidida por el Director Provincial el P. Pedro Duarte y concelebrada por el párroco P. Gustavo González de la Parroquia San Isidro Labrador de dicha ciudad y el P. Miguel Páez C.M.
A continuación compartimos un extracto de la homilía “Solamente mirando al Señor podremos encontrar la luz, porque el Señor vino para mostrarnos la luz, para que no caminemos en tinieblas, si le miramos a Él, nos dirá “Ven y sígueme”… Y eso es lo que las Hijas de la Caridad han encontrado cuando miraron al Señor y El llamó y reunió a las Hijas de las Caridad para que sean testigos de este amor de Cristo crucificado. Y también cuando Sor Myrian le miró al Señor le dijo “Ven y sígueme en la Compañía de las Hijas de la Caridad, para que tu vida sea testigo del amor de Cristo crucificado”. Santa Luisa invitaba a las Hijas de la Caridad a centrarse en Jesucristo crucificado y a depender del Espíritu Santo para que esta vocación se pueda fortalecer. Y esta vocación sea para la Iglesia una bendición y una gracia, porque la vida de las Hijas de la Caridad solamente está para servir a Jesucristo en la persona de los pobres. Sigamos pidiendo a Santa Luisa esta gracia que ella tuvo de contemplar al Señor crucificado, para que ese amor, esa caridad nos empuje a amar a los que más nos necesitan. Recordando también la recomendación que hacía a las hermanas “tengan por única Madre a la Virgen María, pídanle a Ella que sea su única Madre” si María es nuestra única Madre nos conducirá a su Hijo, nos conducirá a la Iglesia que es el Cuerpo del Señor y a ser miembros activos de este Cuerpo, a amar nuestra pertenencia a la Iglesia y a vivir nuestra vocación para que el Reino de Dios siga extendiéndose en el mundo”
En esta celebración participaron un grupo de jóvenes de la Parroquia a quienes también el Padre Pedro se dirigió con estas palabras “Si miran a Jesucristo, si quieren caminar en la luz el Señor les va a revelar cuál es el camino de su vida y de qué manera ustedes van a entregar sus vidas para ser feliz y hacer feliz a los demás, que van a encontrar el amor en el Señor y en la vocación que Él les va a manifestar.”
Y terminaba pidiendo por Sor Myrian que María sea su Única Madre, que sea Ella la que en todo momento le ayude a levantar los ojos del suelo y sí misma para mirar al Señor para mantenerse en ese Si con la gracia que el Señor le va a revelar y que tenga esa humildad al igual que María para decir al Señor “Hágase en mi según tu Palabra”